viernes, 22 de octubre de 2021

LA PALOMA Y EL PAVO

 


Todos sabemos por aquí que la Virgen fue y será siempre una niña, cumpliera los años que cumpliera y pasen los siglos que pasen, pero siempre surge una excepción a toda regla y una advocación mariana de Málaga no se conformó, pegó el estirón, llegó a la adolescencia y ahí se plantó.

 

            Los malagueños lo saben y la tratan como tal, ¡cómo para no darse cuenta con esa sonrisa nerviosa que entre lágrimas le irrumpe inoportuna en los peores momentos! Es una mueca refleja para dar esquinazo al dolor, al suyo y al nuestro. De eso saben mucho los que como Ella viven en la edad del pavo que tienen al ave Paloma por su Madre y Patrona, la Paloma abre sus alas y recoge bajo un manto azul los ecos de sus ataques de risa floja, dopados con la flor de la vida, para que ni una sola carcajada se desperdicie, ya las necesitarán, ya...

 

            Esta Virgen no es de quedarse en casita, tiene edad de merecer y sale a ver a su prima Isabel cuando le viene en gana, de Prim a Puerta del Mar, o se escapa del instituto de calle San Juan para irse de marcha con la pandilla a la plaza de San Francisco. No hay forma de vestirla de uniforme, cuando pone un pie en la calle quiere que todos se enteren, suelta palomas mensajeras para dar las buenas tardes, como lo más normal del mundo, y con su trono araña las fachadas de las casas grafiteando en oro, dejando huella de que pasó por allí, para que todos sepan a dónde va y de dónde viene, esta adolescente no tiene nada que esconder. Para el colosal meneo adolescentes que en su día fueron recuperan por una tarde sus ganas de comerse el mundo, su ingenuidad y alguno incluso el pelo después de viajar a Turquía. Ganando metros con Ella en lo alto se olvidan todas aquellas ilusiones que quedaron pisoteadas por el camino y el pesar por todos los sueños que no llegaron ni siquiera a soñarse. La gente enfervorizada les convence con sus vítores y aplausos, el argumento es aplastante: si Ella sigue despertando pasiones ellos siguen siendo jóvenes.

 

            Yo también fui adolescente pero un día apareció Álvarez Duarte (no tenía ni idea de quién era) y soltó no sé dónde que Tus ojos eran suyos y que los pintó del color del mar de Málaga, con aquella fatídica frase empecé a envejecer, qué desvarío, de sobra sabía que la bahía de Málaga podía teñirse de gris plomizo casi negro, de amarillo cieno en las riadas o con la espuma del caldo del puchero (porque no es nata según dijo la concejala experta en cosas vulgares).

 

            Han pasado muchos años desde nuestra adolescencia compartida, he visto cambiar el color del mar de Málaga muchas veces pero te juro, Paloma, y Tú sabes que no te miento, que sentado en la arena negra hay veces que en el mar descubro ese azul verdoso, ese verde azulado, y reconozco tus ojos, olvido al imaginero y vuelvo a ser aquel adolescente al que ponías ojitos de color.

 

            Con todo el cariño que me permite mi voluntariamente aceptada monogamia devocional, el que aún me eriza la piel cuando distingo el sonsonete de tu malagueña o las maracas de tus rosarios, quiero desearte un feliz decimoquinto cumpleaños, porque más años que esos no puedes cumplir. Quiera Dios que el sábado de Puente a La Puente me arrastre la corriente, para poder desembocar en la bahía de tus ojos del color de la eterna juventud.

martes, 12 de octubre de 2021

¡AY PEANA, PEANITA, PEANA!

 

Venciendo el enfermizo pudor que me causa el mero hecho de plantearme que a alguien le interese mi opinión, que se convierte en bloqueo al sopesar que se busque algo que no se encontrará, me pongo manos a la obra escribiendo un post de este blog agonizante que tantas satisfacciones me ha dado.

 

            Voy a hablar de la exposición “El Verbo Encarnado” que podemos ver en la catedral de Málaga, de la que todos tenéis sobrada información y documentación gráfica, además de vuestra propia opinión, que es lo importante, en ejercicio de una libertad de la que todos gozamos por suministro del Verbo mismo.

 

            En primer lugar me gustaría confirmar que los planteamientos de los organizadores se han cumplido con creces. Recuerdo en concreto que referían su intención de poner en valor nuestra catedral, de descubrírsela a los malagueños, era consciente de que la S.I.C.B. era una gran desconocida pero me ha sorprendido hasta qué punto. Ha pasado de ser una iglesia por fuera, anecdóticamente inacabada (de manquita nada), a ser un interior enorme, acogedor, sorprendente y bellísimo. Después tenemos la alegría de ese rosario de visitantes ajenos al capillismo que ni van a cultos ni de procesiones, quitando una o dos por año, porque esa función de acercar lo religioso a la ciudadanía, a mis vecinos, es la primigenia finalidad de las hermandades de Semana Santa. Tiene que entrarnos de una vez en la cabeza que los santos y las procesiones no están pensados para nosotros sino para ellos.

 

            Lo segundo que quiero apuntar es reivindicar las obras como conjunto. Me sorprende que habiendo otorgado total libertad a los artistas estos hayan creado un conjunto armónico, o al menos unido por una serie de líneas que se cruzan de forma secante o tangente, como si alguien o Algo los hubiera empujado a ponerse de acuerdo. No solo el púrpura cardenalicio unifica la exposición (color que nos ha servido para detectar una nueva variante de daltonismo, ya que unos lo ven verde, para avanzar, o rojo, para detenerse). Apunto algunas ideas sobre este particular:

 

Georges Braque - El pedestal (1921)

- La peana como ofrenda. Muchos de los artistas han utilizado las peanas como síntesis de unos cultos y empleado las flores como recurso. Basta plantarse ante mi Virgen en su capilla o ante el Cautivo en San Pablo para observar que el devoto de verdad, el de fe gorda y orgullosa, usa las flores cuando quiere que lo escuchen con atención. Así se ven flores en las peanas del Rocío (Curro Claros), de la Soledad de San Pablo (Francisco Naranjo), del Cristo de los Milagros (Gabriel Rodrigo) o en la de la Reina de los Cielos (Pedro Alarcón).

 

Victor Vasarely - G. D. II. - 1965

- La peana como trampantojo. Se habla mucho de la modernidad pero muchas peanas utilizan este recurso barroco como medio expresivo. Así los diseños intentan desbordar sus marcos o engañar al espectador con teatralidad. Evidentemente todos estaréis pensando en la peana de La Piedad (Ángel Sarmiento) pero no es la única, efectos 3D tenéis en la plataforma del Cristo de los Milagros, relieves de ficticia orfebrería en la peana cubierta de exvotos del Cristo del Amor (Martín España), ficciones de profundidad en los contraluces superpuestos del jardín acristalado del podio de la Reina de los Cielos, los peces saltan entre las flores a los pies del Cautivo (José Luis Puche) y la pericia hiperrealista del dibujo del pedestal para Servitas de Fernando Prini casi puede sentirse al tacto.

 

Maestro I. A. M. de Zwolle (1470–1490)

- La peana como símbolo de sacrificio y muerte. Es una de las cosas que antes me llamó la atención, la omnipresencia del inevitable final en un acto de celebración. No sé si es consecuencia de la huella que ha dejado en todos la desgracia colectiva de la epidemia o una muestra de nuestra cualidad para sublimar el sacrificio de Cristo como puerta a la mayor de las felicidades. La sociedad se ha enfrentado a la muerte y en la medida de sus posibilidades parece haberla derrotado, provisionalmente claro... Cristo sabe perfectamente de lo que hablamos, así la muerte aparece desparramada a los pies del Redentor (Pablo Cortés del Pueblo), como calavera de Adán abonando la cruz del Cristo de la Agonía (Pablo Flores) -obsérvese como las imágenes se encuadran en marcos que casi asemejan lápidas de nichos-, precisamente el cordero sacrificado es el símbolo eucarístico elegido para el pedestal de Viñeros (José Carlos Torres) y más muertos aparecen en la ventana al purgatorio de la peana del Chiquito, quien los contempla multiplicando su mirada con infinita dulzura (José Antonio Jiménez).

 

Marie Davidson ‎– Working Class Woman (2018) Foto Etienne Saint-Denis

- La peana como expresión artística de este tiempo pero aún más de este lugar. No creo que estemos ante obras rompedoras ni vanguardistas, sí innovadoras desde el punto y hora que los artistas no han rehuido enfrentarse a un encargo muy original con valentía pero asumiendo los condicionantes de su función y del espacio expositivo. No es lo mismo pintar un toro de Osborne o una menina para exponer en la calle y alimentar postureos en cuentas de Instagram que idear un pedestal en el que ha de exponerse una imagen sagrada, imagen cuya devoción los artistas conocen de primera mano como malagueños que son. Me sorprendió muchísimo como pueden ocupar el mismo espacio sin solaparse pintores contemporáneos consagrados, diseñadores cofrades o creadores aficionados a las cofradías. Es como si hubiera un hilo de cariño a esta realidad que los acabara unificando, con independencia de que sus obras puedan gustar más o menos. Así las peanas más pop retoman iconografías barrocas (Nicolás de Bussy o Zurbarán), los dramatismos más arcanos del purgatorio se modernizan con relojes y tatuajes consiguiendo un espacio intemporal pero real. Así lo que debería ser revolucionario, el bestiario de un pavo real y un elefante sosteniendo al Cautivo, en poco acaba difiriendo del academicismo del pedestal de bichos alegóricos de Granda para el trono de la Expiración o la delicada belleza de la peana contemporánea de La Puente (Federico Miró) tampoco dista mucho de las de madera que forman parte del más austero ajuar del Nazareno del Paso y la Esperanza pero sustituyendo el terciopelo por rico damasco carmesí pintado/tejido a mano.

 

            No quiero enrollarme más, pido disculpas a los artistas por no utilizar sus obras para ilustrar este post, creo que con ello llamo a la curiosidad de los lectores y reivindico el verlas in situ, son creaciones fugaces que están hechas precisamente para el diálogo con las imágenes y el espacio expositivo.

miércoles, 23 de junio de 2021

KARAOKE. Diseñar tronos – Sergio Dalma

 

Me gustaría respetaros un poquito más, haber instalado un editor y montado un vídeo de karaoke en condiciones, lo siento, os tendréis que conformar con tener buen oído, darle al play de Youtube con la música y empezar a cantar la letra que os propongo para el baladón. Ojalá os entre la misma risa floja que me ha dado a mí poniendo en práctica el experimento.




Diseñar tronos no es pintar

Mezclando ideas a porrillo

Se debe sintetizar

Y siempre procurar

Que perpetúe su brillo

 

Si solo buscas emular

Echar la pata al del vecino

El pastiche cantará

Se desmoronará

Las modas son un timo

 

Diseñar tronos es pensar

Pensar y descartar

Muchas opciones

 

Empeñarse en procurar

Que nada sea igual

A lo de antes

 

Concienciadísimos los dos

Hermanos y el autor

Que deben renunciar

 

A sus gustos y a su verdad

Si no fracasarán

No harán un trono de verdad

 

Diseñar tronos es pensar

Diseñar tronos es pensar

Es pensar

 

Tampoco se debe olvidar

Que la cultura es importante

Infinito es el saber

Para así comprender

Qué de verdad se quiere

 

Diseñar tronos es pensar…

(De nuevo el estribillo pero con más sentimiento, más a grito pelao)


martes, 8 de junio de 2021

EL ORDEN DE FACTORES

 


Esto no va solo de qué le toca a la Mía en los fastos del Centenario, que también, por eso quiero mostrar mi satisfacción con la inclusión de la Virgen de Consolación y Lágrimas en la procesión magna. En mi cabeza se ha erigido como emblema de esta celebración de la Agrupación; por su pasado artístico, que ha acabado haciendo añicos los cristales de una hornacina demasiado pequeña para contener la calidad de la escuela malagueña; por su vinculación con Antonio Baena y sus delirios de pies en tierra, santo y diablo, patrón y mártir de esta corporación; por ser sus arrugas signo de nuestra Historia, de todas nuestras buenas y malas decisiones; pero sobre todo por mostrarse tras su última restauración como una nueva cabeza de Esperanza injertada en el tronco del que brotará un futuro mejor, en el que el orden de factores de su doble advocación alterará nuestro producto: primero Lágrimas y después Consolación.

jueves, 15 de abril de 2021

AHÍ ESTÁ

 Ahí está esa cinturita de avispa, con su pecho y su cadera; ya en movimiento, saltando al ritmo de la campana o bailando de un lado a otro al compás de la música; ya detenida, como un pedestal que sostiene nuestra Historia o como una repisa que avisa de que hay que agachar la cabeza. 

            Ahí está esa copa rellena del vino cabezón de los comentarios vanos, esos que no saben más que de chovinismo, por los que las cosas son buenas solo por ser de aquí y no porque realmente lo sean (porque las cosas de aquí pueden ser también rematadamente malas). 

            Ahí está esa forma perfecta para expresar la divinidad, elevándola de la mundanidad terrícola todo lo alto que las artes suntuarias lo permitan, disimulando los puntos de costura entre las mitades simétricas del cielo y la tierra, como un reloj de arena y helio con el que engañamos a nuestra vista y a Dios, para que nunca sepa si está bocarriba o bocabajo y así no se nos escape. 

            Ahí está esa garganta, estrangulada para cortar la respiración de quienes contemplan las maravillas que sostiene. 

            Ahí está nuestro mayor invento, desaprovechado, admitiendo infinitas combinaciones, despreciado por las modas y cegueras, incompatible con la vulgaridad y el desarraigo. 

            Ahí está, no es más que un mueble pero qué mueble, señoras y señores, es la peana de carrete.


"The Vision" de Marc Burckhardt.

martes, 23 de marzo de 2021

MIGA

 Viendo como se reutiliza el patrón geométrico de la fachada de San Juan, redescubierto después de siglos escondido bajo la cal, te das cuenta de la necesidad que hay en Málaga de encontrar su identidad. La ciudad se va agarrando a todo aquello que le permita mínimamente reafirmarse. Como esa fachada, con su geométrica capacidad para representarnos y hacernos felices, han caído a cientos y seguirán cayendo en una carrera sin fin marcada con migas de pan que se van comiendo los pájaros.

 

Málaga patterns

 

José González Bueno

 


Estefanía Recio

 

Loving Books. Mapas y Cía.

 

Rocío Cortés

 

Rafael Narváez. Arquitectura.

viernes, 12 de marzo de 2021

SAMPLE

 

En el año 1987 un dúo de DJs llamados Coldcut remezcló un tema de otro duo de música Hip Hop, ya consagrado como uno de los grandes, se llamaba Eric B. & Rakim y el tema era “Paid In Full”.

 


            El tema supuso un éxito fulminante tanto para los remezcladores como para los remezclados pero no solo para ellos, también para una artista entonces desconocida que apenas sonaba unos segundos en forma de sample: Ofra Haza, fallecida prematuramente en el año 2000. El éxito de la remezcla fue tal que disparó su popularidad fuera de Israel, reeditándose el álbum de música tradicional de donde Coldcut habían extraído el sample, “Yemenite Songs”. Creo que es de todos conocido que el tema en cuestión, “Im Nin´Alu”, debidamente remezclado para los clubs, fue un tremendo éxito, más si partimos de la base de que era arcaica música tradicional de Yemen.

   


            Pocos años después, en 1990, un grupo fantasma de estudio bajo el que se escondía el músico y productor Michel Cretu, repitió una jugada similar y con idéntico éxito internacional. Bautizado como Enigma sampleo otros pocos segundos de canto gregoriano en el tema “Sadness Part 1” e hizo historia de la música pop, aparte de una fortuna. Pero lo que muy pocos esperaban es que a remolque de aquel éxito, en 1994, los mismísimos monjes del Convento de Santo Domingo de Silos colocarían su álbum “Chant” en los primeros puestos del Billboard americano por delante de no pocas estrellas del pop y que serían superventas en medio mundo.

 


             ¿Y todo esto a qué viene? Pues precisamente al hilo musical de la trascendencia brutal que ha tenido para un grupo y un género musical la introducción del sample de la marcha “Eternidad”, compuesta por el recientemente también fallecido Sergio Larrinaga Soler e interpretada por la Banda Rosario de Cádiz, en “Crîtto de lâ Nabahâ” de Califato ¾, los Eric B. & Rakim del nuevo pop andaluz. Y no digo éxito en los ambientes cofrades andaluces, hablo de repercusión a un nivel inimaginable para el género de las marchas procesionales. Yo conocí el tema en Radio 3, en el programa Paralelo 3, de lo mejorcito en música electrónica que puede escucharse en España, por supuesto fue tal mi sorpresa que me sacó de uno de mis habituales estados catatónicos en Twitter, aquello era algo grande y necesitaba compartirlo.

 



             Pocos  meses después, un muy tuno C. Tangana en estado de gracia se percató de inmediato de lo identitario de este tipo de música e introdujo en el pelotazo “Demasiadas mujeres” otro sample de Sergio Larrinaga y Rosario de Cádiz, en esta ocasión de la marcha “El amor” que por supuesto se eligió como fanfarria de apertura del álbum con el que el madrileño se lo va a comer todo este año, posiblemente también a nivel internacional. Añadir para rematar la faena que medio mundo ve ya a través de la plataforma HBO la esplendida serie “30 monedas” de Eloy de la Iglesia sin saltarse un solo día los títulos de crédito musicados por Roque Baños, no sé si sois conscientes de lo que esto significa…

 


            Creo que estamos en una ocasión única para reivindicar y exportar el género musical cofrade por antonomasia, el de las marchas para bandas de cornetas y tambores, agrupaciones musicales, bandas de música o lo que sean. Nuestra cultura es y debe ser nuestra pero tenemos también el deber de compartirla y promoverla por todos los medios posibles, solo trasciende lo que se universaliza. Tengo la certeza absoluta de que hay un mundo ahí afuera que aún no sabe lo que se pierde.

jueves, 25 de febrero de 2021

RECONVERSIÓN INDUSTRIAL

 

Ante la atrevida tesitura de reabrir por una nueva temporada algo tan moribundo como un blog, y si encima es de cofradías ni te cuento, siempre me planteé que en las presentes circunstancias sería con un protagonista: Pepe (alias @ProyectoLazaro_ y @YoHagoFotos en Twitter).

             Decir que siento afecto por él servirá para minusvalorar mi mensaje pero ocultarlo sería aún peor, así que dicho está, también que intentaré ser objetivo.

             Posiblemente Pepe sea la persona que mejor sirva para sintetizar mi opinión sobre cuál debería haber sido la forma cofrade de enfrentar las consecuencias del confinamiento, por supuesto después del obligado compromiso con el bien de los demás. Lo pongo de ejemplo por su reconversión, titular de una cuenta que “se ganaba la vida” publicando fantásticos retratos de la realidad, mejor dicho fotos de una realidad que él se inventa y nosotros disfrutamos, podía haber hecho como todos, lamentarse ante la impotencia de no poder hacer lo de siempre pero no, ante la falta de nuevo material se reinventó interviniendo digitalmente sus fotos, utilizando la imaginación como salvoconducto para escapar de la triste realidad, para saltarse la barrera perimetral. Él no solo se abrió un camino personal nuevo, ha influido también en otros que con mejor o peor fortuna se han tirado al barro de la experimentación con unas herramientas digitales que son menospreciadas más por prejuicios que por merecimiento. Son instrumentos de creación abiertos a todos, incluidos los que solo tienen buenas intenciones. Por cierto, a la gente les divierten más las buenas intenciones que las buenas obras pero eso ya es harina de otro costal...

             Sirva por tanto Pepe de ejemplo no solo a los fotógrafos sino a las cofradías que, ya no por capricho sino por obligación, tienen el deber de tejer cestos/canastos maravillosos con los mimbres que cada tiempo les proporcione.

  

            Ante la imposibilidad de elegir con qué obra ilustraba este post opto por subir precisamente la primera, aquella con la que considero dio Pepe su salto artístico al más allá, la conocí el pasado 23 de mayo y no me percaté de lo que encerraba hasta que la amplié y comprobé que los nazarenos de cabeza ¡no tenían ojos!, de golpe se me abrió un mundo de interpretaciones, incluida una cita de una parábola del Evangelio de Mateo 15, versículo 14: “Dejadlos: son ciegos que guían a ciegos. Y si un ciego guía otro ciego, los dos caerán en el hoyo”, ilustrada magistralmente por Pieter Brueghel el Viejo en 1568 y que curiosamente llegó a ser readaptada a lo cofrade de forma mucho menos sutil por el pintor sevillano Manuel León.





Si quieres conocer más de la obra de Pepe, pincha aquí.