El cangrejo verde vive hacia el pasado.
Su vida es una cuenta atrás de ciclos estacionales
ordinarios,
bueno, no siempre.
En la recta final lucha contra el tiempo.
Anda de espaldas con impulso animal tratando de posponer lo inevitable.
Desanda sus pasos como quien retrasa las agujas del reloj.
Trata en vano de agarrar al tiempo con sus pinzas.
El tiempo es más fuerte que el animal y lo derrota.
Pero el cangrejo verde pronto cura sus heridas.
Poca derrota puede sufrir quien vive y camina hacia el
pasado.
El cangrejo verde tiene el don de la eterna juventud.
Imagino que el cangrejo raro ese que anda para detrás en vez de para un lado, habrá elegido su pasado, es maravillo pasar el borrador, a veces...
ResponderEliminarNo hay un pasado, el pasado se va haciendo al desandar.
EliminarMi pregunta es ¿Es este cangrejo una evolución genética de su tradición? ¿Podemos oponernos a su naturaleza? ¿Es ya parte del organismo anual?
ResponderEliminarNo puedo evitar defenderlos. Me gustan los animales, los cofrades en particular. Ya tendré tiempo de volverve viejo cofrade gruñon.
Eliminar