domingo, 28 de octubre de 2012
sábado, 27 de octubre de 2012
MI PRIMER REPORTAJE FOTOGRÁFICO
He iniciado mi andadura como fotógrafo
cofrade. No quiero pecar de inmodesto pero, según me dicen, tengo madera. El personal se ha quedado impresionado y me ha animado a publicarlas para que las
conozcáis, y no sólo mis familiares, también gente a la que creía le caía mal.
Estos son los que más me han insistido.
Las imágenes son todas de Málaga, tienen fuerza
por sí mismas, pero me gusta comentarlas para que comprendáis el espíritu
creador que las inspira. Espero en breve hacerle también fotos a otras semanas
santas, cuando no llueva claro, porque la luz es lo más importante para un buen
fotógrafo.
Para que veáis que me lo tomo muy en serio,
público las fotos con mi firma, que hay algunos desconsiderados que se
aprovechan del arte de los demás y las copian sin pedir permiso.
1. Ésta, la verdad es que no me acuerdo bien qué es lo que fotografié. Si la
hice el Domingo de Ramos digo yo que será un trono. ¿Es bonita eh?
2. La vela estaba encendida pero sopló el aire y la apagó. La imagen tiene
mucha fuerza. Nadie, que yo sepa ha hecho un foto a una vela apagada. Me quedo
embobado mirándola.
3. El Señor de la Oración
en el Huerto. ¡Que túnica! ¡Qué categoría de bordado! Impresiona. Me lo puso
fácil.
4. La Virgen
de la Concepción
Dolorosa. Conseguí lo que pretendía, que se plasmara su
mirada hacia el cielo. Además aunque el trono esté quieto tiene un efecto de
movimiento muy interesante.
6. Ésta me encanta. La Virgen
del Rocío es la que está detrás del arbotante. Lo que pasa es que la hice de
lado y no he aprendido a girar las fotos. Torced vosotros la cabeza a la
derecha y la veréis estupendamente.
7. El estandarte de la
Virgen de Gracia. Siempre se tiene que meter algún nazareno
por medio…
8. Ésta tiene mucha carga filosófica. La belleza no debe estar reñida con la
profundidad. He querido reflejar aquí las paradojas de la Semana Santa. Si le
haces una foto a un Senatus de lado puede ser cualquier cosa, un rollo de
alambre, un tendedero o una antena de televisión. Yo medito mucho con mis
fotografías, a veces meditando me quedo hasta dormido.
9. Le estaba haciendo una foto a un nazareno y le dí a un botón raro de la
cámara. Creo que ponía “macro”, “supermacro” o no sé qué. Aunque esté un
poquito cerca se ve perfectamente que es un nazareno.
10. El Señor de la
Sentencia , con sus romanos y Pilatos lavándose las manos. Lo
que más me gusta es el cielo del anochecer que aparece en la esquina izquierda.
12. El trono de Salesianos. A ver si tengo tiempo de quitarle el dedo con Photoshop porque la foto es buenísima.
13. ¿Y qué me decís de ésta? Si parece que la Virgen del Amor está en
otra dimensión. No es por nada pero es una obra de arte aunque esté feo que yo
lo diga.
14. Trono de la Soledad
que este año estrenaba manto, por eso hice la foto desde detrás.
15. Y acabo con el Cristo de Mena, comiéndose la calle entre el clamor
popular.
Publicado el 28 de
abril de 2011 en Pasión en Sevilla
viernes, 26 de octubre de 2012
DOMINGO DE RAMOS
Era domingo.
Con grandes dolores se incorporó lentamente de la cama, a tientas buscó y
encontró las gafas y la dentadura postiza. Acercó con la garrota las zapatillas
y tras calzarlas se puso en marcha. A rastras llegó a la cocina. Abrió la
puerta del armario para prepararse las gachas prescritas facultativamente para
desayunar. Aunque… hoy no. Hoy no habría gachas. Sin pensárselo se preparó un
aromático café y pan con aceite.
A continuación un nuevo cambio en la rutina. No
se dirigió al sillón orejero frente al televisor que siempre emitía la misma
cadena. En bata salió a la calle a comprar un periódico. Quería saber que
pasaba en el mundo pues hoy se sentía parte de él. Observó en el trayecto que
su garrota se había quedado en casa y que no la echaba de menos.
Con avidez leyó las noticias de aquél día de
primavera. La experiencia le supo a poco. Quería salir a la calle. Oler la vida
que renacía. Pero no podía salir así, debía asearse y afeitarse. ¡Qué curioso!
Observó en el espejo que en su barba y en sus sienes el pelo blanco se estaba
tornando negro.
La ropa de su armario no le satisfacía aquel día.
Subió de dos en dos las escaleras dirección al altillo. Allí encontró lo que
necesitaba. Un pantalón vaquero y una camisa blanca cuyas mangas dobló hasta
los codos. Y salió a la calle.
Al poco se encontró de frente con dos morenas de
pelo largo que bromeaban. Una de ellas dejo escapar bajito un ¡guapo! que le
hizo levantar el ánimo. Volvió la cabeza y empleó unos segundos en ver alejarse
el estupendo par de jóvenes siluetas que se contoneaban acompasadamente.
Aunque era pronto le apetecía tomar una cerveza.
Le apetecía como si tuviera sed de años. A la segunda empezó a entablar
conversación con los compañeros de barra, con los de mesa, con los camareros.
Afinidad espontánea con desconocidos que ya eran amigos. ¡Qué bien se sentía!.
Quedaron para otra vez aunque no sabría cuando sería.
Y de nuevo a la calle. Se dejo llevar. Quería
correr, saltar. Atravesó el parque como loco, manchándose los zapatos y los
bajos de los pantalones, sin mirar si había caca de perro, sin importarle que
los papeles estuvieran fuera de las papeleras o los árboles mal podados. No
tenía ninguna preocupación. Sólo la de jugar compulsivamente. Se columpió hasta
el agotamiento.
Cansado se aproximo a una muchedumbre. Sin mucha
educación la atravesó. Se puso en primera fila. De repente sintió una mano
fuerte que agarraba la suya. Miró hacia arriba y vio la figura enorme de su
padre que le sonreía. En la otra mano su madre le puso una manzana de caramelo
y mientras la mordisqueaba vio pasar por delante a Dios montado en un burro.
Publicado el 9 de abril de 2011, Domingo de Ramos, en Pasión
en Sevilla.
jueves, 25 de octubre de 2012
IMAGINEROS ANDALUCES FAMOSOS EN SUS CASAS A LA HORA DE COMER
Este
post va de imaginería, de imagineros importantes. La selección no se basa en
criterios artísticos sino de justicia geográfica. Justicia hacia una serie de
imagineros de posguerra, famosos todos en sus casas a la hora de comer, que
devolvieron el patrimonio religioso destruido tras la instauración de la Segunda República.
El foco de atracción que merecidamente goza la Semana Santa
sevillana permite tener como referentes en todos los círculos cofrades
nacionales a aquellos artistas, sevillanos o no, que realizaron su actividad o
legaron su obra a la capital andaluza. A nadie hay que presentar a Castillo
Lastrucci, Sebastián Santos, Buiza, Ortegra Bru, incluso a Eslava, Illanes o
Fernández Andes… Son firmas relevantes o con tallas conocidas por todos.
Por eso mi intención es ponerlos en plano de
igualdad (no en cuanto méritos artísticos, cuestión sobre la que no pienso
entrar) con una serie de imagineros realmente conocidos pero que por no
trabajar en Sevilla o no tener obra relevantes en la capital, han visto
restringido su mérito, su valía o reconocimiento público, a marcos geográficos
concretos, el del radio de acción de sus respectivos obradores, casas que les dieron
de comer tanto a ellos como a sus colaboradores.
Me he querido restringir al ámbito andaluz, a fin
de no extenderme demasiado. Es ésta una enumeración destinada a todos los
andaluces. Creo que nos conocemos mucho menos de lo que creemos. Nuestra
curiosidad debe abarcar lo que nos unifica pero también lo que nos diferencia.
Sólo así podremos conservar la riqueza de esta tradición en todos los lugares y
en todas sus facetas. Allá van mis candidatos:
JUAN MARTÍNEZ CERRILLO. Escultor nacido en 1910 en Bujalance (Cordoba). Se atribuye a su taller una ingente producción repartida por toda la provincia de Córdoba y provincias limítrofes. Por su significación inserto fotografía de Mª Santísima de
FRANCISCO PALMA BURGOS. Autor malagueño nacido en 1918. Estamos hablando de un puntal de la imaginaria malagueña prácticamente desconocido fuera de su órbita, que se extiende hasta la provincia de Jaén por situar finalmente en Úbeda su taller. Selecciono por ello su primera obra para la referida ciudad jienense, el Cristo Amarrado a
ANTONIO LEÓN ORTEGA. Nacido en Ayamonte en 1907. Autor de un gran número de las imágenes religiosas de Huelva capital si bien su producción se extiende por toda la provincia y la de Badajoz. Incluyo fotografía del Cristo de
JOSÉ NAVAS PAREJO. Nacido en 1883 en Álora (Málaga) aunque plenamente adscrito a la escuela granadina donde radicó su importante taller, del que salieron imágenes y esculturas de gran calidad, además de imagineros de valía. Inserto foto del Nazareno de Alhaurín el Grande de 1940.
MANUEL PINEDA CALDERON. Otro claro ejemplo
es este imaginero nacido en 1906 en Alcalá de Guadaíra. Reparte una ingente
producción por buena parte de los pueblos
de la provincia sevillana, sin embargo es prácticamente desconocido. Foto del
Cautivo de Alcalá de Guadaíra, información cortesía de Siervo de María.
Aunque limitada, esta es mi breve selección de
imagineros andaluces famosos en sus casas a la hora de comer. Abro en su nombre
las puertas de sus comedores a todos los comensales, la mesa es amplia. Estamos
todos invitados. No hay mejor manera de conocerse que compartir con ellos mesa
y mantel.
Comedor de Manuel Pineda Calderón.
Reedición del post publicado el 15 de marzo de 2011 en Pasión en Sevilla.
Reedición del post publicado el 15 de marzo de 2011 en Pasión en Sevilla.
miércoles, 24 de octubre de 2012
VIAJES EL PUENTECITO, DESDE LA CARTUJA HASTA EL INFINITO
Desde que D. Ciriaco del Puente Madison, nuestro
insigne fundador, adquiriera de la Universidad de Wisconsin la patente del proyecto
T.E.T.E.P. y visionariamente la pusiera al servicio del viaje cofrade
espaciotemporal, nos convertimos en pioneros de este campo turístico. La oferta
de nuestra firma es, con mucho, la más completa del mercado, para envidia de
nuestros competidores. Somos la agencia líder de viajes espaciotemporales
cofrades, sin discusión.
Pasamos a informarles de las novedades de esta
precuaresma, esperando que sean de su agrado:
2º) SEMANA SANTA PERDIDA: Dentro del catálogo de acontecimientos cofrades ya desaparecidos, como novedad para este 2011, pueden ya reservar su pasaje para presenciar el cortejo de
4º) SEMANA SANTA COSTALERA: Chicotás que hicieron historia. Nuestros agentes-costaleros, llevan cientos de Semanas Santas espaciotemporales a las espaldas, escudriñando lo mejor. Se sorprenderá de la evolución del caminar de los pasos desde los tiempos casi medievales hasta la actualidad. Contamos este año como novedad la primera chicotá como capataz del recientemente fallecido Rafael Ariza, en el año 1947, frente al palio de
5º) SEMANA SANTA “EXTREME”: Nuestro paquete más juvenil. Especialmente pensado para cofrades que gustan de emociones fuertes y desfiles de alto riesgo. Por fin podrá reservar viaje para presenciar “en su integridad” el desfile efectuado el 24 de marzo de 1932 por
6º) SEMANA SANTA MALAGUEÑA: Desde los tiempos de nuestro fundador, oriundo de Málaga, nunca ha faltado un buena carta de viajes espaciotemporales cofrades malagueños. Este año tenemos una gran sorpresa para nuestros clientes: nuestros ojeadores han comprobado que la leyenda de Jesús el Rico es cierta. Es decir que este año podrán reservar su pasaje a
No queremos concluir este anuncio, mejor dicho
este post, sin comunicarles que tenemos unos precios excelentes para los viajes
por grupos. Las cofradías más punteras organizan ya viajes para sus oficiales a
fin de que conozcan sus antiguas estaciones de penitencia. Son de gran utilidad
para recuperar viejas tradiciones, diseñar enseres con sabor añejo o aprender
de los errores cometidos. Se recuerda que estos pasajes se suelen sufragar por
las arcas de la hermandad, puesto que no son viajes que se efectúen por placer,
sino por el bien de la cofradía.
No queremos entretenerles ni quitarles tiempo para
que recorran otros posts de este maravilloso blog. Si está dudando no se lo
piense más, disfrute en primera persona todas aquellas Semanas Santas con las
que siempre soñó. Estamos para servirle y recuerde: VIAJES EL
PUENTECITO, DESDE LA CARTUJA AL INFINITO.
Publicado el 25 de
febrero de 2011 en Pasión en Sevilla
martes, 23 de octubre de 2012
EL ALPINISTA
La escalada por la
cara Sur era inviable en aquella estación. Todos los montañeros que la había
intentado habían fracasado. El resplandor cegador y el calor suponían un
escollo de imposible superación. Por tanto, el reto había de ser afrontado por
la cara Norte, mucho más sombría, pero superable.
Todo el perímetro de la montaña era recorrido
por un río caudaloso, una hermosa torrentera difícil de sortear, llena de rocas
y troncos. No obstante, con paciencia, el alpinista pudo encontrar un tramo del
cauce en el que los obstáculos permitían vadear el río sin ser arrastrado por
la corriente. Tras el río y su valle circundante sólo cabía ascender.
La ladera Norte aparecía partida por un
camino, por un eje de simetría que partía la montaña en dos y que conducía en
línea recta hasta la misma cima. Raudo, el alpinista emprendió este camino por
ser el más corto. Fue un gran error, las piedras que resplandecían bajo el sol
le impedían caminar. Era ésta la vía más escarpada, mejor dibujada, la de
piedras más afiladas, con más salientes. Por ella era imposible transitar, sin
perjuicio de la belleza que debía tener su contemplación a vista de pájaro.
Desechado el camino mas rápido hacía la
cúspide, el alpinista hubo de tomar una ruta más lenta que resultó no menos
bella. Prados verdes, aunque según recibieran la luz del Sol parecían rojizos o
azulados y también negros durante la noche, se abrían al transitar del
montañero. Estas suaves extensiones se encontraban periódicamente tachonadas de
obstáculos de vegetación, tupidos bosques que irrumpían sobre los prados,
ordenadamente dispuestos, como si una fuerza superior hubiera decidido que
tenían que estar allí y no en otro sitio. Reflejando la dorada luz aparecían
árboles maravillosos, arbustos frondosos, ramas ensortijadas que caracoleaban
como serpientes, frutos y flores de la gama más diversa que el alpinista jamás
pudiera imaginar. Sin embargo estas flores no desprendían olor alguno. El
intenso perfume que se percibía en el ambiente debía proceder de algún otro
sitio, de una fuente desconocida. Igual de misteriosos resultaban los
movimientos de tierra que periódicamente inquietaban el ánimo al alpinista. La
tierra estaba viva, lo demostraba cada poco.
Con cuerdas y clavos el montañero fue
ascendiendo. Ya se veía el Sol resplandeciendo en lo alto, más no era posible
seguir por la ladera Norte. El montañero hubo de rebasar un peligroso
desfiladero en la parte Este de la montaña y situarse finalmente en la cara
Sur, aquella que fue desechada primeramente. Efectivamente, la parte meridional
era absolutamente luminosa, cegadora para ojos humanos, pero no había otra
forma de continuar. Abajo, en el fondo de precipicio, el río reflejaba la luz
de la luna creciente.
Llegado a este punto, el montañero perdió toda
visibilidad de la cúspide. La tapaban unas densas nubes, como de algodón, que
la flanqueaban. A través de ellas apenas podía verse algo. Apartó la blanca
niebla con las manos, como si fuera sólida. El alpinista ya estaba en la
cumbre.
Todos los pesares quedaron atrás, el
cansancio, el esfuerzo, el sacrificio merecieron la pena. Tras aquella pared de
nubes blancas irrumpía la cima. Un cenit de hermosura. Una alcanzable
perfección. La escalada había sido un éxito. El montañero había llegado a lo
más alto, a buen puerto, al mejor destino y pudo cumplir por fin su deseo,
depositar un beso en su mejilla.
Publicado el 27 de
Diciembre de 2010 en Pasión en Sevilla.
PASIÓN ECOLÓGICA
1. Entrada en Jerusalén
2. Cena
3. Oración en el Huerto
4. Beso de Judas
5. Jesús ante Anás, la bofetá
6. Jesús ante Caifás
7. Azotes
8. Coronación de Espinas
9. La clámide roja
10. Ecce Homo, el balcón de Pilatos
11. Sentencia
12. Jesús Nazareno carga con la Cruz.
13. Jesús caído
14. Jesús Despojado
15. Crucificado entre dos malhechores
16. “¡Tengo sed!”
17. Expiración
18. Buena Muerte
19. Longinos atraviesa el costado
20. Descendimiento
21. Traslado
22. Sepulcro
23. Resurrección
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